Blogia
Relatos de azotes

El Convento

Autora: Shevishana

Durante el año de recopilación de datos y pruebas el profesor Herrera me enseño multitud de técnicas, TAT, Test de Roscshtar, entre otros. Y por fin llego la hora de lleva a cabo un trabajo de campo.

A lo largo del año anterior, todos los miércoles en su descolorido despacho había sido inevitable hablar sobre el instrumento que presidía el despacho, aquel enorme paddle, asimismo me enseño otros que tenia guardados, en un cajón con llave por ser estos muy antiguos. Poseía tawses, paddles, y todo tipo de armas de castigo. Se notaba que le entusiasmaba el tema, y a mi se me debía notar a la legua, aunque lo tratara en vano de tapar con un interés meramente intelectual. Pero tener esas paletas en las manos, uf. No podían por menos que hacerte temblar.

Incidimos sobre los castigos físicos y la repercusión que estos tienen en la conducta humana, de una parte la redención, y en otra menos conocida el placer. Estudiamos conductas sadomasoquistas, y como estas habían sido utilizadas en la publicidad. Mujeres de cuero para anunciar colonias, pequeñas lolitas, susceptibles de recibir unos azotes, una joven caperucita que roba el perfume Chanel, mientras el masculino lobo se somete y se limita a aullar. Todo tenia un objetivo básico. La persuasión usando el fetichismo como instrumento.

Así de este modo decidió indicarme que el tema de mi trabajo de campo serian los azotes, los castigos físicos, y las instituciones donde se han usado o aun se usan. Para ello me proporcionaba la universidad una beca, para visitar lugares donde se estudiase el tema, o bien sitios donde aun se llevaran a cabo.

Comencé, pues mi trabajo. En primer lugar me mando a Salamanca. Al parecer existía un convento en las afueras, donde aun hoy día se impartían castigos físicos. Se trataba de un lugar de recogida de muchachas de familia bien, que por una u otra razón necesitaban ser enmendadas. Habían madres prematuras, chicas cazadas por sus progenitores fumando o realizando el acto sexual, chicas que habían confesado su homosexualidad en un retrogrado seno materno, etc. Si bien antiguamente hubieran reconducido la vida de estas jóvenes hacia las contemplaciones seglares, en este caso se limitaban a impartirles catequesis, y clases de historia, álgebra, y literatura. Las mantenían limpias y aseadas, y libres de pecado, confesaban ante el cura de modo secreto y ante sus tutoras con castigo corporal como penitencia.

Por supuesto que no habéis iodo hablar de este lugar. No pensareis que viene en sitios Google o en la agencia de viajes de spankofilos, no? El lugar sitúa los castigos físicos dentro de la clandestinidad, hoy día seria impensable que se permitieran estas licencias según la constitución actual. Y yo me dirigía a el por el amplio conocimiento en la materia del doctor Herrera, quien conocía a la abadesa profundamente.

Así fue como llegue al convento, haciéndome pasar por una de esas chicas descarriadas que habían sido pilladas in fraganti en actitud poco decorosa con un varón. Me puse en manos de la Madre Superiora. Por supuesto que en ningún momento pensé que yo fuera blanco de castigos, la superiora conocía mi calidad de espectadora por lo que yo espere encontrar un trato favorable. Al fin y al cabo estaba allí por trabajo.

Aunque me excitaran los azotes, la angustia que me trasmitían los muros no me inspiraban para imaginar un correctivo placentero. El convento en su fachada exterior era plateresco, corriente muy común en la zona, pero se hallaba realizado sobre un monasterio anterior de orden románico, del que conservaba la disposición y materiales del interior. Era mucho mas antiguo, mas oscuro, mas retraído. Las paredes de piedra eran húmedas y frías, el suelo también, andar con una suela fina ponía los pelos de punta. Olía por todas partes a piedra y arena, a cirios y a iglesia cerrada.

Las internas dormían todas juntas en un amplio dormitorio de camas dispuestas una al lado de la otra, muy cerca, casi el espacio justo para andar de canto entre una cama y otra. Había unas 20 aproximadamente, y venían de todas partes de España, pero por lo que vi, mucho apellido noble, y mucha familia pía.

Yo ocupe una cama del final, junto a una chica de Alicante de 20 años, era simpática, pero no decía porque estaba allí, y actuaba con cierta timidez, al igual que el resto de las jóvenes, se comportaban de manera muy recatada y sin excesos.

Como llegue por la noche únicamente presente mis respetos a la Madre superiora quien me indico que acomodara en mi catre. Venia cansada del viaje, y sin prestar mucha atención me puse un pijama de verano cortito y fino, y me eche a dormir, bien tapadita hasta el cuello.
Zzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz
De repente, sentí una sacudida, una mujer vestida sin hábitos pero con bata de religiosa me zarandeaba y me gritaba no se que, de si era aquella una manera correcta de dormir. Con el sueño no me enteraba de nada, y a causa del viaje ni siquiera sabia aun donde me encontraba. Cuando si reaccione fue cuando me saco a tirones de la cama y abrí los ojos para contemplar el enorme dormitorio comunal a oscuras, con las paredes bañadas por la luz de la luna entrecortada por los barrotes de las ventanas. Hasta ella se encontraba encerrada en aquel lugar sombrío.

La hermana que me zarandeaba, de repente se sentó en mi cama, tiro de mi brazo y con el de mi cuerpo amodorrado por el sueño, y me deposito en sus rodillas, ahí sí me desperté, ¿qué c*** hacia esta tipa???? Pero cuando resolví mi duda fue a causa de un impacto fuerte sobre mi trasero que hacia que este ardiera. Me estaba azotando!!!! Me tenia agarrada por un brazo y con el otro no se que demonios estaba usando pero picaba como el diablo. Instintivamente alargue mi brazo a la nalga donde recibí el azote, a lo que sentí un fuerte tirón de la misma, quedando inutilizada. Con una sola mano, me sujetaba las mías, era una mano fuerte y grande para ser de una mujer. Me reprendía por dormir tapada hasta el cuello. “Los brazos fuera de la manta!!!” Me indicaba “así no podréis caer en la tentación” “y no se duerme bocabajo” “conozco todos vuestros trucos para satisfaceros”. Mientras me regañaba note que me desprendía de un tirón seco de mi pantaloncillo del pijama para después hacer lo mismo con mis braguitas. Yo me intentaba zafar, pero era ducha en su propósito la jodida. Sentí un azote fuerte en el trasero, ahora si sabia que me azotaba con la mano, era una mano recia, fuerte, de exprimir coladas a mano, de recolectar la huerta y arrancar las malas yerbas, curtida y encallecida. Los azotes eran rápidos y enérgicos, me azotaba profusamente en la parte mas baja de la nalga, donde escocía horrores.

Después de darme unos 30 azotes con la mano, mi grupa ardía, reposo la mano sobre ella, mientras me reñía de nuevo, me explicaba que eso era por haberme interpuesto en el castigo, que el castigo en si venia a continuación. La mano no solo estaba apoyada sobre mi nalga, la muy ***** me sobaba, me palpaba a gusto, parecía que disfrutaba. Bollo reprimida... pensé.

No fue mucho el tiempo de pensar. De mis deducciones me saco a base de un buen paletazo en el trasero. Ahora si sabia que había utilizado, era una paleta. Con el tiempo averigüe que utilizaban el instrumento en cuestión para golpear la ropa para que se secara, además de para indicar el buen camino a jovencitas.

Me rocío 20 paletazos lentos, espaciados, con orgullo. Estoy segura que se sentía orgullosa de su trabajo, de su buen hacer, porque se deleitaba en ellos.

PLASSS tiempo PLASSSS tiempo PLASSSSS tiempo PLASSSSS

Se me escapaban las lagrimas, no estaba llorando de rabia sino se me escapaban de escozor. De impotencia de no poder parar ese tremendo dolor que recaía sobre mis nalgas.

Después me proporciono otros diez por llevar esa indumentaria poco adecuada y me indico que ya me proporcionarían un camisón decente. Además, me insto a seguir dos de las normas mas importantes en la cama, no dormir bocabajo, en ningún caso; y los brazos fuera de la manta para que se puedan ver en una revisión.

Sin mas se fue. Según avanzaba por el pasillo con la paleta en la mano, yo empezaba a asimilar lo que me costaría dormir con semejante escozor en mis nalgas, que me ardían, no podía apoyarlas contra el lecho, y lo húmeda que me encontraba.

Cuando abandono el habitáculo, algunas de las chicas levantaron la cabeza primero hacia donde se había perdido la hermana y después hacia mi. Mi compañera de al lado me alcanzo la mano, y me la acaricio con suavidad. “Intenta dormir con la almohada en los riñones, eso alzara el trasero y te rozara menos con el colchón”

Así lo hice y al poco y tremendamente escocida y dolorida me quede dormida.

Continuara ...

9 comentarios

Gabriela -

Me voy a hacer unas evaluaciones de autismo con un psicólogo infantil sico-habilitador, pero me preocupa porque como el tiene más experiencia con niños, me pasó que después de la entrevista con mi mamá, el me iba aplicar a día siguiente las pruebas pero en ese momento sentí mucho miedo y salí corriendo se ahí espantadísima en ese entonces me iba hacer las pruebas a las 11:00 de la mañana, mientras tanto mi mamá ya le pagó 100 dólares por el diagnóstico, tres días después me vino una curiosidad de saber que me hubiera salido , entonces le insistí a mi mamá en volver para hacerme las pruebas, pero ella ya se desmotivo y fuimos a la fundación entra a mi mundo y el psicólogo ya no estaba, lo llamaron y el dijo que yo tenía que estar bien segura para las pruebas y esta vez dijo que a las 12:00 una hora más tarde que la vez pasada, la verdad es que no se que me salga en el diagnóstico.
La verdad es que mi mamá quería este diagnóstico para ver si me aplazaban la aprobación de inglés en la universidad, pero como ya me voy a estudiar a distancia otra carrera con base matemática igual a la anterior, lo que ocurre es que me cambio no por la carrera sino por presiones del cene cid, van a cerrar el campus para irse al sur de la ciudad y a mi me que da muy lejos , además de que en el sur ya no van a poderme ayudar mi tutor académicamente, me voy cansar muchísimo y no voy a aguantar. Este cambio me desmotiva para las evaluaciones porque mi mamá me dijo que esto tenía un objetivo, al ya no ser así dio que ya no le importaba para nada y que si quería volver para terminar el diagnóstico era ya solo por mi curiosidad y me advirtió que puede desilusionarme el diagnóstico, ya que puede ser lo que no espero.

Patty -

Dónde está la segunda parte??? es un relato magnifico, quiero más!!! :D

rebelde -

Esta muy bein pero estoy deacuerdo con lo ke dices tico muy corto el castigo y debio ser castigada con el cinturon
y para cuando la segunda parte?

Tico -

Me parece muy corto el castigo, creo que debió castigarla pegándole con un cinturón.

ruso -

¿ Para cuando la segunda parte ?

Fer -

¡Cómo me gusta este relato! Me pone a cien por hora. A ver si nos deleitas con algún otro regalo de esta categoría.

Anónimo -

Bueno, bueno!!!

Tane -

Hacía tiempo que no leía este relato, tan bueno como la primera vez, para cuando más?

Granuja -

¡Óle, óle y óle!